Así se hizo justicia... como la mayoría de las cosas en Chile: en la medida de lo posible...
una cadena perpetua a todas las vidas involucradas...
a la de tu valiente mamita Claudia que es un ejemplo de lucha para todas nosotras: las mujeres de este país que no nos gusta ser víctimas y, a partir de ello, nos empoderamos para vivir...
para quienes legislan y la tarea pendiente de proteger a nuestros niños y niñas...
para todo nuestro pueblo que solidarizó con esta causa que no es una historia más ni una noticia de crónica roja, sino la radiografía cruel de una realidad que cruza muchos aspectos de nuestra vida como sociedad y como individuos y que nos recuerda la urgencia de reparar (nos) a partir de hacer justicia, de poner en la mesa los temas relevantes, de defender los derechos de todos y todas, incluso de ciertas minorías que en definitiva conformamos la mayoría ... por último Javierita... decir que no fue en vano... nunca debiera haber pasado... pero no fue en vano...
una cadena perpetua a todas las vidas involucradas...
a la de tu valiente mamita Claudia que es un ejemplo de lucha para todas nosotras: las mujeres de este país que no nos gusta ser víctimas y, a partir de ello, nos empoderamos para vivir...
para quienes legislan y la tarea pendiente de proteger a nuestros niños y niñas...
para todo nuestro pueblo que solidarizó con esta causa que no es una historia más ni una noticia de crónica roja, sino la radiografía cruel de una realidad que cruza muchos aspectos de nuestra vida como sociedad y como individuos y que nos recuerda la urgencia de reparar (nos) a partir de hacer justicia, de poner en la mesa los temas relevantes, de defender los derechos de todos y todas, incluso de ciertas minorías que en definitiva conformamos la mayoría ... por último Javierita... decir que no fue en vano... nunca debiera haber pasado... pero no fue en vano...
“Uno no escoge el tiempo para venir al mundo; pero debe dejar huella de su tiempo
Nadie puede evadir su responsabilidad.
Nadie puede taparse los ojos, los oídos, enmudecer y cortarse las manos.
Todos tenemos un deber de amor que cumplir,
Una historia que nacer, una meta que alcanzar
No escogimos el momento para venir al mundo:Ahora podemos hacer el mundo en que nacerá y crecerá
la semilla que trajimos con nosotros”.
(Gioconda Belli)