Amor, compañero, cuántas veces mezclé tu vida con esta oscuridad que me mueve como marioneta. Necesito que te quede claro: junto a la llegada de mis hijos, conocerte ha sido lo más bello que me pasó en siglos, cantar contigo me colmó de esperanza, alegría y luz… ironías del titiritero… Gracias a la imposible maravilla de haberte tenido a mi lado pude darme cuenta que ser feliz contigo no era sólo mi tarea. Puedes estar tranquilo. Ya nada nos atará, nadie perjudicará la vida que elegiste... sólo nos unirá esta pequeña historia que escribimos con mucho amor, contradicciones y matices...
...porque tú ostentas los valores y antivalores más parecidos a los que yo quiero conservar, … te espero a la otra vuelta... espero llegar a tiempo, buscarte y cumplir el sueño de envejecer amándonos...
Hasta siempre... aunque me faltó poder escucharte decirme adiós...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario